No soy especialmente aficionado a ver la televisión, cuyo consumo reduzco a alguna película con la familia, algún documental y, cada vez menos, resúmenes informativos. También algún evento deportivo especial, pocos, la verdad, y principalmente por la satisfacción de verlo con mis hijos tomándome una cerveza. Todavía con la mente en el Mundial de Sudáfrica, …